Páginas

Buscar

jueves, 7 de febrero de 2008

EL GRITO

¡Como intentaron acallar el grito!

mas el grito que todo lo envolvía,

en los profundos pozos resistía,

como una letanía, como un rito.

 

"Me podrán aplastar, mas no callarme"

gritaba el grito su verdad desnuda,

reverberaba el eco con premura,

"ni con cadenas lograrán atarme"

 

No puede encarcelarse el pensamiento,

ni someter el discurrir de la razón,

la mente nace libre, como el viento;

 

y sólo el hombre gobierna su timón;

navega a barlovento o sotavento,

más suyo siempre el mar, suya la voz.

 

Mayte Tudea

No hay comentarios :

Publicar un comentario